Con la llegada del otoño llegan los primeros resfriados y gripes, os vamos a dar unos consejos avalados por la SEFAC (Sociedad Española de Farmacia Comunitaria) para prevenir, tratar y diferenciar la gripe del resfriado.
En primer lugar hay que saber que la gripe es claramente estacional, se da a finales de otoño y durante el invierno y cesa al final de éste, sin embargo, los resfriados se pueden producir en cualquier época del año.
Tanto la gripe como el resfriado están provocadas por virus y son de remisión espontánea, son muy molestas y afectan a la calidad de vida, además pueden derivar en problemas más graves como otitis, sinusitis, neumonías…
Aunque los síntomas sean parecidos, la realidad es que se manifiestan de manera diferente:
En la gripe aparece fiebre alta, mayor de 38-39ºC, dolor muscular articular y de cabeza intenso y la congestión y los estornudos son muy débiles.
En el refriado la fiebre es baja y el dolor es sólo un simple malestar pero la congestión nasal y los estornudos son muy acusados y molestos.
¿Cómo prevenirlos?
Debido a que ambas son muy contagiosas, extrema las precauciones para evitar su transmisión:
Lávate las manos con frecuencia, los virus pueden permanecer activos un tiempo limitado en objetos, asientos, instrumentos de cocina, barandillas…y mucho más tiempo en la piel de las personas, por los que es aconsejable evitar el contacto físico con las personas afectadas.
Tápate la boca y la nariz al toser o estornudar y utiliza pañuelos desechables.
La O.M.S. recomienda vacunarse de la gripe, sobre todo a personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas y en los grupos de riesgo que determinen cada año las autoridades sanitarias. Esta vacuna sólo es válida para la gripe, por tanto no nos protege frente a los resfriados. No existe en la actualidad ninguna vacuna efectiva frente a éstos.
¿Cómo tratarlos?
Sigue una dieta en la que abunden los zumos de frutas, caldos de verdura y pescado, yogures y purés, todos ellos de fácil digestión lo que favorecerá una recuperación más rápida.
Bebe mucho líquido y mantén una atmósfera húmeda, para ello es recomendable el uso humidificadores, ya que contribuyen a mantener el grado justo de humedad en el ambiente. Si tienes gripe esto te ayudará a disminuir la deshidratación y en el caso del resfriado aliviará la sequedad de las mucosas nasales y de las vías respiratorias favoreciendo las funciones protectoras naturales de éstas. Por ello se recomienda mantener una humedad entre el 40-60% cuando se está sano y entre 60 y 70% cuando hay catarro.
Evita fumar, beber alcohol, café, té o infusiones estimulantes.
El tratamiento con medicamentos debe ser siempre individualizado según los síntomas que tenga cada persona y su intensidad, por eso es recomendable pedir consejo a tu médico o farmacéutico y no automedicarse. No existe un tratamiento eficaz para el resfriado o la gripe, lo que se busca es disminuir la molesta sintomatología. Insistimos en que la gripe y el resfriado son causados por virus, por tanto los antibióticos no están indicados para tratarlas, sólo el médico podrá prescribirlos en caso de que detecte una complicación bacteriana.
Si quieres más información no dudes en ponerte en contacto con nosotros, nuestra prioridad es tu salud.